La Misión de la Iglesia Ortodoxa en América, la Iglesia Ortodoxa Autocéfala local, es el ser fiel en llevar a cabo el mandamiento de Cristo de “id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado” para que toda la gente se salve y llegue a conocer la verdad.
El Predicar, según la voluntad de Dios, la plenitud del evangelio del Reino a todos los pueblos de Norteamérica e invitarlos a ser miembros de la Iglesia Ortodoxa. El utilizar para su misión los distintos lenguajes de los pueblos de este continente.
El ser el cuerpo de Cristo en Norte América y ser fiel a la tradición de la Santa Iglesia Ortodoxa.
El dar testimonio de la verdad, y por la gracia Divina y el poder del Espíritu Santo, revelar el camino de Cristo de santificación y salvación eterna para todos.
Adoptado por el Santo Sínodo de Obispos de la Iglesia Ortodoxa en América en 1990.